sábado, 28 de septiembre de 2013

ZTE Grand S Flex

 
El ZTE Grand S Flex es la apuesta más madura de la compañía china para conquistar el mercado español. Estamos ante un móvil con un panel de 5 pulgadas que se sitúa un paso por delante a los lanzamientos de gama de entrada con los que se ha presentado la firma en España, pero mantiene un precio moderado de 270 euros que lo convierten en una buena opción para presupuestos modernos. Además, cuenta con el gran atractivo de integrar soporte para conexiones 4G, tiene una buena cámara de 8 megapixels y una memoria interna de 16 GB. Todo ello con el sistema operativo Android 4.1 Jelly Bean. Hemos tenido la ocasión de probar en profundidad este móvil. Te contamos nuestras conclusiones.

Diseño y pantalla

Uno de los aspectos que más diferencian al ZTE Grand S Flex es su diseño. En un primer vistazo llama la atención el contraste entre la parte trasera y lateral blanca y la parte donde se aloja el propio panel en negro transparente. La carcasa blanca sobresale ligeramente a los lados respecto al panel, de forma que genera la impresión de formar un halo cuando miramos el móvil de frente. Se trata de un móvil bastante alargado y con las esquinas redondeadas, de forma que resulta bastante cómodo de agarrar y es sencillo llegar a cualquier rincón del panel incluso cuando se utiliza a una sola mano. En nuestras pruebas nos ha parecido un móvil bastante resistente y competitivo a nivel de peso, teniendo en cuenta que se trata de un móvil de 5 pulgadas. Sin duda, un diseño atractivo y que nada tiene que envidiar a los lanzamientos más potentes del panorama móvil. Lo que menos nos ha gustado de este terminal es el mecanismo para insertar la tarjeta MicroSIM, ya que requiere utilizar un clip metálico para extraer la bandejita y luego introducir la tarjeta. Siempre resulta más cómodo utilizar otro tipo de mecanismo mecánico.

En cuanto a la pantalla, el panel de 5 pulgadas tiene naturaleza TFT y una resolución HD de 1.280 x 720 pixels, suficiente para poder ver con buen nivel de detalle los contenidos del teléfono. También nos ha gustado el nivel de brillo del panel, aunque no llega a la altura de los dispositivos más avanzados del mercado, como por ejemplo el Samsung Galaxy Note 2. Lo que sí nos ha parecido es que la respuesta de la pantalla del móvil de ZTE a veces no alcanza el nivel esperado, y puede resultar necesario acostumbrarse a este punto hasta que se domine del todo.
Cámara fotográfica

Otro de los puntos fuertes del ZTE Grand S Flex es la cámara fotográfica. Estamos ante un objetivo trasero con resolución de ocho megapixels, autoenfoque y flash. El resultado de las fotografías es más que aceptable para un usuario medio, lo que nos permitirá inmortalizar nuestros momentos favoritos. Este objetivo tiene un zoom digital de 3,8 aumentos. Además, también es capaz de grabar vídeos con calidad de 1080p. En cuanto a la cámara delantera, tiene una resolución de 1 megapixel que cumple con lo justo a la hora de realizar autorretratos. Además, puede grabar vídeo en calidad 720p y utilizar aplicaciones de videollamada como Skype.

Memoria y potencia

Para almacenar nuestras aplicaciones y archivos multimedia, el Grand S Flex cuenta con 16 GB de memoria. Esta tarjeta nos deja un espacio útil de 13 GB. Sin duda, una buena capacidad que debe resultar suficiente para trabajar sin problemas con este dispositivo. En este caso no incorpora una ranura para tarjetas MicroSD, así que en el caso de necesitar mayor capacidad deberemos optar por algún servicio de almacenamiento en la red como SkyDrive, Google Drive o Dropbox.

El móvil de ZTE corre a través de un procesador de doble núcleo con una potencia de 1,2 GHz, que se une a una memoria RAM de 1 GB. En el uso normal del teléfono en menús de Android y apps permite movernos con buena fluidez (el sistema de Google no requiere de mucha potencia), aunque puede apreciarse algo más de lentitud en los juegos que requieran un mayor rendimiento gráfico. Por otro lado, también hemos notado que estamos ante un procesador menos potente a la hora de iniciar o reiniciar el sistema, un proceso que resulta algo lento.

Sistema operativo y aplicaciones

El sistema operativo elegido para este terminal es Android 4.21.2 Jelly Bean. Se trata de una versión de los iconos de Google en la que una de las principales inclusiones es el asistente de voz Google Now. Esta herramienta aprende de nuestras preferencias y nuestro uso de las búsquedas para ofrecer información personalizada. Además, contamos ya con más de un millón de aplicaciones disponibles dentro de la tienda oficial. El ZTE Grand S Flex también incluye varias apps propias de la compañía china. La que nos ha parecido más interesante es la que funciona en la pantalla de bloqueo del móvil. Se trata de un anillo que incorpora hasta seis accesos directos a diferentes aplicaciones que podemos personalizar. Gracias a ello, se agiliza mucho el inicio de las apps más utilizadas. También nos ha gustado la capacidad de escoger entre diversas animaciones cuando nos movemos por las diferentes ventanas del menú.

Conectividad

La conexión más destacada de este móvil es la capacidad de conectarse a las redes 4G de alta velocidad, diez veces más rápidas que las redes 3G. Se trata de una ventaja muy interesante si se vive en una de las grandes ciudades españolas, ya que de momento estamos en un primer momento de despliegue de las redes a lo largo de la geografía española. También contamos con conexión WiFi para conectarse a la red local y tecnología Bluetooth 3.0 para intercambiar información entre dispositivos compatibles. Además, cuenta con A-GPS para aprovechar el navegador integrado en la plataforma Android. En el campo de las conexiones físicas, incluye un puerto Micro USB para cargar el equipo y transferir información al ordenador. Además, también tenemos radio FM, una característica que agradecerán los usuarios que suelen escuchar sus emisoras favoritas cuando viajan.

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